Reseña: PAPIR.- ‘IX’

El trio danés PAPIR lleva años en la escena sin hacer mucho ruido, pero con el respeto de la audiencia. Su escasa presencia en festivales y el rango limitado de sus conciertos pudieran hacer dudar a alguien del talento que atesoran, pero la realidad es bien diferente. Han pasado quince años desde su primer álbum y su capacidad para sorprendernos sigue estando intacta. Fieles a su sonido y a la libertad para seguir explorando nuevos territorios en su continuo viaje sonoro, con ‘IX’ nos presenta un trabajo sin cadenas, sin ataduras, con largas canciones que gravitan libremente entre los estilos que la banda lleva investigando desde hace años. Su psicodelia instrumental, se colorea de finas texturas post-rock, impulsadas por hipnóticos ritmos kraut en un caleidoscopio de música ambiental exenta de etiquetas. Hemos tenido que esperar tres años desde su anterior álbum ‘7’ (reseña aquí), y ahora con mas de 70 minutos de mágicas canciones parecen compensarnos con ‘IX’. Puede que la ausencia del 8 en la numeración de sus albúmenes no sea ninguna casualidad (deberé de comprobar este dato), y la banda haya querido compensar la espera. Lo cierto es que estas jams contiene todos los elementos que un amante de la psicodelia y los sonidos ambientales más experimentales desearía escuchar. El viaje auditivo de los daneses presenta composiciones fluidas que se alargan en bucles infinitos que siempre vuelven al redil. Esta capacidad para llevar al oyente a donde quieren es uno de los elementos diferenciadores de su sonido. Largas improvisaciones que van tornando su aspecto en una mutación orgánica entre etéreas atmósferas.

‘IX’ está disponible vía Stickman Records.

PAPIR son:

Nicklas Sørensen – Guitarra
Christoffer Brøchmann Christensen – Batería
Christian Becher Clausen – Bajo

‘I’ ofrece más de nueve minutos de placidos sonidos ambientales en los que las reverberaciones lisérgicas aparecen en bubles acompañando a finas texturas post-rock.

‘II’ es una fusión de elementos ambientales, ritmos kraut y momentos drone en su parte inicial, para convertirse en una locura psicotrópica en un aparente caos instrumental que te volará la cabeza. Con algunos teclados la banda hace que la pista vaya y venga alternando la pusa magnética de sus bellas melodías, con un aquelarre psicodélico de un aspecto caótico. Pero PAPIR se sabe mover en el caos y convertirlo en algo plácido.

Con un sonido algo más ortodoxo, la melancolía parece invadir ‘III’. Otra suave canción que gravita entre luces y claros entre delicados y pausados acordes. Con teclados envolventes la banda se inclina a territorios más progresivos con una sobriedad pasmosa. En una evoluciona un escenario post-rock prescindiendo caóticos pasajes.

‘IIII’ contiene una variedad de sonidos vintage evolucionando en una jam en la que todas las piezas parecen encajar. El virtuosismo de Nicklas a las seis cuerdas hace que las espirales se sucedan entre sus implacables ritmos. La repetición como argumento para desarrollar idead sonoras de lo más dispares y atractivas.

Los ensoñadores pasajes de ‘IIIIII’ corrobora la inclinación hacia la música ambiental de PAPIR. Un lento génesis que se convierte en un gratificante bálsamo para el oyente.

Como continuación de la pista anterior ‘IIIIII’ parece recoger el relevo con un tono más colorista sin renunciar a su esencia ambientales. De nuevo en un tono algo melancólico las bellas melodías se suceden en un escenario sonoro minimalista. Música ambiental en su máxima más hermosa expresión.

Si la mayor parte de los cortes anteriores gravitaban entre los 10 minutos, ‘IIIIIII’ es una jam de más de veinte minutos de devaneos instrumentales en los que la elegancia del jazz, convive con la psicodelia en un sofisticado baile sonoro. Armándose con pausa, la canción contiene elementos que la van moldeando entre espirales rockeras, atmósferas progresivas y por supuesto esa psicodelia ensoñadora que llevan en sus genes. Con un flujo constante la pista ofrece los momentos más pesados del álbum con los instrumentos de los tres músicos brillando con luz propia. Una constante evolución que pule sus aristas haciendo que la fisonomía de la jam mute a cada instante hasta llegar a un susurrante y ensoñador ocaso con el que mecen al oyente  

Papir

Stickman Records

Reseña: EDENA GARDENS.- ‘Dens’

Cuando unos magníficos músicos se juntan para disfrutar tocando, dejándose llevar por su creatividad y espontaneidad, el resultado son álbumes mágicos como este ‘DENS’. El proyecto del guitarra de PAPIR, Niklas Sorensen, el batería de CAUSA SUI, Jakob Scott y el bajista Martin Rude, tras la publicación de su álbum homónimo ‘EDENA GARDENS’ (reseña aquí) y ‘AGAR’ (reseña aquí), parecía haber culminado con las exploraciones jazzeras de ‘LIVE MOMENTUM’, ahora llega el capítulo final de la trilogía. ¿El último álbum de este magnífico supergrupo? Supongo que el tiempo nos dará la respuesta, pero por las palabras de la banda, puede que este sea su final. Porque estos músicos viven el presente y en él se centran para plasmar su creatividad con las sensaciones que brotan en cada momento sin pensar en el futuro. EDENA GARDENS es una banda que vive del presente, pero que perdurará en el futuro, porque estos tres álbumes tiene la calidad suficiente como para ser recordados en el tiempo. Sumergiéndonos ya en su contenido, en ‘DENS’ deletrea acertadamente el último tercio del nombre del grupo. Y fiel a su estilo, la banda gira hacia adentro en lugar de hacia afuera, recurriendo a profundos matices de ambient, slowcore y el fantasma de Mark Hollis. Mientras mantiene su toque psicodélico, el trío teje las líneas entre géneros de una manera que se está convirtiendo en su propia firma. Siempre desde la pausa, el trio se mueve hacia distintos lugares sonoros sin perder el rumbo de lo que significa el proyecto EDENA GARDENS. El álbum reúne horas de improvisación libre en un tamaño coherente. Las ediciones impecables y la magia del estudio mejoran la sensación de naturaleza casi narrativa a medida que avanza el álbum. Invocando cualquier cosa, desde una fogata crepitante, huesos crujientes y el canto de las dunas de arena sus bellos sonidos ambientales nacidos de la improvisación son impulsados por el bajo y la batería, sentando una base sólida pero fugaz. Allí las relucientes líneas de guitarra de Nicklas nunca se sintieron más libres y exploratorias, lo que hace de ‘DENS’ una nueva experiencia sensorial que nos lleva en volandas de manos esa guitarra mágica, unos ritmos cadentes, contenidos e hipnóticos. Sonidos expansivos y ambientales que lentamente van sumiéndonos en un nirvana sonoro sumamente estimulante. El antídoto perfecto tras un duro día de trabajo en el que el cuerpo y la mente necesitan desconectar. Y, ¿hay me forma de hacerlo que dejarte llevar por un mundo mágico en el que todo es belleza? La respuesta es NO, porque EDENA GARDENS son capaces de componer canciones terapéuticas ideales para reconfortarnos del estrés y de los malos rollos cotidianos. Ponte cómodo y disfruta de este trance sonoro, porque, quién sabe si será el último.

‘Wald’ nos introduce en el álbum con elegantes y reconfortantes acordes de guitarra en un ambiente relajado y completamente cautivador. La canción es un gratificante bálsamo sensorial para expandir nuestra mente en un espacio de descanso. Estructurada en capas, la lenta batería y una ambientación envolvente nos sitúan en un particular jardín del Edén. La pista repite su armonía modulándola en un placentero viejo sonoro.

Ahora en un escenario sonoro de oscuridad la meditativa ‘Dusted’ juega con la libertad creativa manteniendo la esencia atmosférica del trio. Sin forzar la máquina, el corte se envuelve en efectos y un ritmo pausado combinando elegantes pasajes guitarra a los que insertan sutiles elementos jazz. Otra canción hermosa que no necesita de poderosos riffs para cautivar al oyente.

‘Vini’s lament’ es un tributo a THE DURRUTI COLUMN. La canción se envuelve en una atmósfera impregnada de nostalgia mientras el trio explora sin complejos su creatividad para situarnos en un entorno onírico bajo relajantes pasajes ambientales. Nuevamente aflorar levemente los tonos jazz en una pista que se deja llevar por un flujo ambiental con un nítido carácter psicodélico.

Con algo más de nueve minutos ‘Morgensol’ mantiene el tipo en el mismo escenario en el que se han desarrollado las pistas anteriores. Sus tonos grises y los hermosos acordes de guitarra evolucionan lentamente en un fascinante paseo por bellos entornos sonoros. Con su cálido sonido la canción penetra en nuestros corazones para transmitir esa sensación de paz presente en todo el álbum. En esta ocasión con un carácter más experimental la pista no pierde la cara y se muestra fragante y balsámica.

Con ‘An Uaimh Bhinn’, el trio da un paso adelante para sumergirse en un entorno de efluvios psicodélicos sin perder su esencia ambiental. Las prisas no existen en este cautivador álbum en el que estos músicos expanden su sonido a oníricos entornos sonoros llenos de magia. El contenido ritmo se ve coloreado con una guitarra siempre ensoñadora para ofrecer un rico tapiz sonoro creado desde la sencillez. Un claro ejemplo de que menos, es más, solo la espontaneidad es suficiente para crear bellas canciones instrumentales.

‘Sienita’, con sus 14 minutos de improvisación vertiginosa y plenamente formada, que abandona cualquier engaño de estudio, además de un órgano con un solo doblaje, que sube y baja como la marea. Como he dicho tantas veces, las pistas de larga duración son el espacio perfecto para que los músicos desarrollen todo su potencial e inquietudes, y esta, es un claro ejemplo de ello. Estratificando el sonido en capas, EDENA GARDENS crea otra maravilla instrumental adornada con hermosos pasajes que habitan en un espacio melancólico, pero sumamente gratificante. El suave inicio del corte se ve alterado por pasajes mas complejos y experimentales en su parte central, antes de retomar la senda de calma y volver a los orígenes en esta hermosa improvisación.

Sin darnos cuenta llegamos al final de este cautivador transito por hermosos entornos sonoros con ‘Dawn Daydreamers’. Otra bella canción creada desde improvisaciones en las que la banda muestra su cara más sosegada y relajante. En un álbum en el que no hay episodios distorsionadores de su trance sonoro, esta canción mantiene el tipo sin salirse del guion pero fluyendo con libertad por ese entorno sombrío que aquí se abre a la luz con pasajes más elaborados si cabe que gran parte, que el reto de canciones.

Edena Gardens

El Paraiso Records

Reseña: MUSING.- ‘Somewhen’

MUSING es el nuevo proyecto instrumental del músico canadiense Devin “Darty” Purdy, miembro de bandas como CHRON GOBLIN o GONE COSMIC. Devin presenta este proyecto con la publicación de ‘SOMEWHEN’.  Un álbum intimista inspirado por los extremos simultáneos de belleza y rebeldía de la vida y que fue escrito y grabado durante una época de agitación vital transformadora, convirtiéndose en un recuerdo existencial de crecimiento y cambio. Sus canciones ambientales crean una atmósfera meditativa usando elementos de la psicodelia espacial, el kraut rock y sobre todo del post-rock. Con unas vibraciones cercanas al proyecto de Nick Di Salvo (DELVING), las ocho canciones instrumentales del álbum recorren bellos pasajes siderales con un tono futurista y variados elementos de la música ambiental. El periodo pandémico y los cambios vitales de Dave le hacen explorar de forma personal una serie de vibraciones instrumentales que no había indagado con profundidad en sus otros proyectos musicales. Así las cosas, ‘SOMEWHEN’ nace en un periodo convulso tratando de proporcionar ese bálsamo que todos necesitamos ante las adversidades. En el transcurso de sólo seis meses antes del nacimiento de su hijo, Darty no solo aprendió por sí mismo a usar Logic Pro y a producir música por su cuenta, sino que también revolucionó su forma de escribir canciones, permitiéndose procesar sus reflexiones existenciales sobre la belleza y la rebeldía de la vida a través de la creación de canciones instrumentales multifacéticas y de mal humor. Al hacerlo, también empleó una versión más inteligente y brillante de su característico talento en la guitarra y motivos pensativos de sintetizadores, así como percusión de su viejo amigo y compañero de banda Brett Whittingham. El resultado es un notable álbum de música ambiental instrumental en el que la psicodelia moderna y las texturas post-rock nos ayudan a mirar hacia nuestro interior en búsqueda de esa paz que todos necesitamos. El álbum cuenta con algunos momentos en los que sus riffs se engrosan mostrando sus genes stoner para poner el contrapunto a las bellas y elaboradas melodías.

La canción de apertura, ‘Who Awoke’ contiene elementos de psicodelia, post-rock, y ritmos kraut que construyen esta hermosa pista ambiental. Con elementos que me recuerdan el sonido de Nick Di Salvo en su banda Delving, la canción explora bellos pasajes sonoros con una estratificación en capas con la que es ensamblada. La canción incluye una grabación de los latidos del corazón de Elliot, el hijo de Darty, en el útero y sirve como una crónica del despertar musical que tuvo lugar en torno a la creación del álbum.

Con una ambientación de psicodelia espacial con tonos kraut, ‘Flight to forever’ surca el universo gravitando en una atmósfera hipnótica y etérea. Inspirada en la novela de ciencia ficción de los años 50 del mismo nombre escrita por Poul Anderson (ambientada en un futuro lejano, 1973) sobre un físico que prueba conducir una máquina del tiempo y descubre que sólo puede avanzar en el tiempo y termina montándola hasta el fin del universo. La pista entra en una espiral repetitiva entre tonos siderales que se aceleran. La pista cierra con una magnética e inquietante línea de bajo describiendo un desolado entorno.

‘Floating Man’ mantiene ese espíritu repetitivo con una vocación futurista que se ve alterada por embestidas de riffs monolíticos que le empujan a un espacio post-rock. Su inquebrantable ritmo, hace que la pista fluya con soltura en una canción de ida y vuelta, acabando como comenzó y con una parte central más virulenta.

Las cosas parecen cambiar de alguna forma en ‘Hurry Wait’. Una hechizante melodía post-rock se adorna con una melancólica atmósfera y algún riff crujiente y metálico. De nuevo la dualidad de los instrumentos estratificados hace que MUSING consiga su objetivo.

Mas atmosférica y psicodélica ‘Reverie’ cumple los requisitos que le puedes pedir a cualquier psicodelia instrumental bajo atmósferas cósmicas. Un ritmo lento pero impasible, y la guitarra revoloteando en una nebulosa hipnótica que se intensifica según avanza en corte. Atravesada la parte central, la pista va haciendo su sonido más pesado e intenso en un nuevo giro argumental, sin salirse del guion.

‘Frontal Robotomy’ es una dicotomía en la que los ritmos kraut se adornan con pasajes mas propios de película de serie B bajo una atmósfera vintage y un tono de misterio.

Mucho más fornida y pesada, la cegadora ‘Reality Merchants’ en su primera mitad, se recuesta más en riffs Stoner, antes de despeñarse en su parte final por barrancos heavy-psych.  Un ying y un yang que también utilizada elementos post-rock entre sus plácidos pasajes psicodélicos.

‘ Ghosts of Extinct’ la única canción basada en sintetizador, y concluye el disco con una atmósfera más sombría e inquietante. Un ritmo persistente, algunos elementos exóticos y un bajo amenazante, son los elementos que contiene esta enigmática canción que cambia el ambiente mayoritario del álbum. Curioso.

Musing

Reseña: EDENA GARDENS.- ‘Agar’

Con menos de un año de vida, EDENA GARDENS, el nuevo proyecto del guitarra de PAPIR, Niklas Sorensen y el batería de CAUSA SUI, Jakob Scott, junto al bajista y multi-instrumentista Martin Rude, parecen asentarse como una banda con vocación de futuro. Nuevamente bajo los designios del sello El Paraiso Records, publican su segundo y fascinante álbum ‘AGAR’. Continuando con su búsqueda de nuevas rutas en las que plasmar su vasta creatividad, el trio emerge con las fuerzas intactas en un nuevo álbum en el que los sonidos ambientales impulsados por brillantes líneas de guitarra se fusionan con ritmos en capas en una conjunción multifacética. Un vasto pozo de ideas del que rescatan canciones ambientales con solidas líneas de bajo y un sonido relajante. EDENA GARDENS son una banda que se compenetra por sí misma con la calidad de unos músicos que no necesitan ponerse de acuerdo y solo necesitan dejar que su música fluya libremente en busca de un objetivo común. De esta manera componen cautivadoras canciones con las que no solo innovan, sino que muestran el amplio pozo de ideas o sonidos que solo están implícitos o se tocan brevemente, creando una agregación de sonidos fuera de nuestro alcance. ‘AGAR’ es una de esos trabajos que manejan la sensibilidad del oyente proporcionando gratificantes momentos atmosféricos en los que la psicodelia se expande tomando elementos de free-jazz, desert-rock y muestran una insuperable belleza atmosférica. Con canciones que fluyen libremente sobre un amplio espectro estilístico, la superposición del sonido por capas es el principal elemento que las une. De esta manera logran expandir su creatividad para plasmarla en un hechizante álbum para degustar desde la calma. Ya sabemos que la inquietud de estos chicos les lleva a no renunciar a nada, pero con este segundo trabajo, me hacen tener la esperanza de que el proyecto continúe para seguir proporcionándonos nuevos y maravillosos trabajos como este. El futuro es el único que tiene la respuesta sobre la posible continuidad, así que, de momento, degustemos esta joya sonora. Un trabajo que tendrá su continuación con un nuevo álbum en vivo registro durante su primera actuación en directo, y que verá la luz, en un par de semanas bajo el nombre de ‘LIVE MOMENTUM’ que también verá la luz bajo los designios del sello El Paraiso Records.

Ensoñadores pasajes de guitara y un ritmo aparentemente inconexo van haciendo brotar ‘Forst’. Susurrantes y balsámicos pasajes instrumentales acarician al oyente con bellas melodías en una canción con aspecto de jam. Un puzle sonoro que transmite una sensación de relax a pesar de sus múltiples aristas a lo largo de siete minutos de psicodelia ambiental perfumada.

Evocando la puesta de sol en el horizonte, la hermosa ‘Sombra del Mar’ revolotea al son de una suave brisa con pausadas melodías que se superponen. Multiplicando el sonido de las seis cuerdas, el ritmo calmado acompaña una armonía que se diluye entre las olas para rearmarse en cada pasaje hasta la llegada del ocaso.

  ‘Veil’ nos muestra un sonido más sobrio. Lento y engrosando sus armonías, el corte se toma su tiempo para armarse en su vocación cinemática. Evocador de grandes espacios atmosféricos, se pausa transitar hace que una sensación de calma se apodere de nosotros. Con delicadeza la guitarra floydiana va tomando un mayor protagonismo mientras la base rítmica golpea firme, pero con pausa. Usando la repetición como un elemento a favor de obra, van incorporando pasajes silenciosos en una atmosfera que evoluciona hacia un espacio sensorial a través de sonidos expansivos. Vibraciones cósmicas de tierra arrasada toman el protagonismo de una pista sensorial y con elementos arenosos a pesar de su suavidad. Especialmente en la parte final logran que la monotonía se convierta en virtud, y los doce minutos pases volando.    

‘Halcyon days’ es un interludio panorámico de hermosa calidez analógica usado como rampa de salida para el siguiente corte. 

Con el bajo como protagonista en su apertura ‘Dreich’ palpita bajo el cielo abrasador masajeándonos con suaves y cálidas melodías. Otra canción atmosférica que no levanta la voz manteniendo un tono pausado entre diferentes ornamentos sonoros ensamblados con delicadeza.

Con suaves brisas exóticas ‘Ascender’ es otro breve interludio atmosférico de escasos dos minutos.

‘Montezuma’ mantiene en cierto modo el tono desértico que se vislumbra en parte de canciones del álbum. Lenta y suave, la canción es bálsamo reconfortante que nos acaricia con dulzura encada nota. Con un tono más psicodélico, los pasajes de guitarra penetran profundamente en nuestros sentidos ofreciendo un espacio ideal para la relajación. Los sofisticados solos de guitarra contrastan con una base rítmica sobria.

En este fantástico collage sonoro de relajantes vibraciones ‘Crescent helix’ se muestra como un ‘verso suelto’ y explora vibraciones más propias del free jazz. Un sonido vanguardista impregnado desustancias psicodélicas del que asoma una cierta vocación blues. Un estado caótico que de forma natural se convierte en algo cohesionado, reflejando el talento de estos brillantes músicos.   Estamos ante un nuevo hito en la capacidad compositiva de los daneses y su capacidad para amoldarse a distintos entornos sonoros sin renunciar a su verdadera vocación.

 Edena Gardens

El Paraiso Records

Reseña: SHEM.- ‘III’

SHEM es un colectivo de músicos alemanes que tiene como objetivo interpretar piezas sonoras de improvisación influenciadas por una amplia gama de épocas y variedades de música psicodélica y progresiva. A través de la combinación elementos de ambient, drone, psych así como con elementos de rock espacial, construyen improvisaciones épicas empapadas de reverberación. Atravesando barreras sensoriales consiguen rebasar los convencionalismos con una experimentación sonora inspirada en la kosmiche music nacida en los 70’s, que se salta todas las barreras. En constante movimiento y cambio de forma dentro de este reino, su tercer álbum ve al colectivo alemán explorar más los aspectos meditativos y rituales de la música ambiental, el sonido arrebatos de rock espacial y los ritmos atávicos del krautrock. Construyendo tensión a través de distorsiones zumbantes y oscilaciones arremolinadas, llevadas por constantes patrones de percusión y líneas de bajo inquebrantables y envueltos por distantes cantos primarios del más allá, los cuatro Las pistas de «III» representan los capítulos de un viaje catártico, invitando al oyente a experimentar diferentes estados de ánimo a través del éxtasis y la repetición. Este relajante álbum permite expandir tu mente con agradables y balsámicas vibraciones de corte cósmico, en una ceremonia devocional de gran poder terapéutico.

‘III’ está disponible a través de Clostridium Records en una edición limitada a 200 copias en verde jaspeado / 200 copias en vinilo negro e incluye póster tamaño A3 con logotipo y pegatinas La versión verde jaspeada también incluye una alfombrilla con el logotipo.

Los más de dieciséis minutos de ‘Paragate’ reflejan un insondable viaje por el espacio sideral a través de desarrollos psicodélicos envueltos en tonos cósmicos. Lentos desarrollos ambientales empapados en revelaciones y efectos que vagan por el cosmos, impulsados por un cansino ritmo kraut. Un parsimonioso génesis que gravita entre supernovas y asteroides con una narrativa de ficción mas propia de un film futurista. Reconfortantes pasajes instrumentales que causan un efecto balsámico y expansivo de la mente del oyente. Los teclados y sintetizadores se entrelazan con guitarras lisérgicas en un placentero sueño intergaláctico. La nave cósmica se deja llevar por las corrientes del universo en dirección a algún remoto lugar. Con elementos drone, logran crear la atmósfera perfecta para el desarrollo de la pista. Podríamos pensar que a lo largo de este cuarto de hora no sucede nada, pero cuando sin duda, la fluidez con la que se ejecuta hace que todo resulte cautivador. Es una pista para dejarse llevar por ese estado gravitatorio que no sabemos adonde nos llevará, pero el viaje resulta interesante y agradable. Rock espacial en un mundo por descubrir, que cualquier amante del género, le gustaría encontrar.

En algo menos de tres minutos, ‘Lamentum’ cambia de alguna manera su fisonomía, sin perder la esencia respecto al corte anterior. Cálido y reconfortante, el corte palpita con un espíritu devocional al que se añaden algunas voces ceremoniales de aspecto celestial. Un mantra sonoro para liberarnos de las malas vibraciones y dejarse llevar por la meditación.

‘Restlicht’ mantiene el carácter meditativo de un álbum para la introspección y la expansión de la mente. En una oscura atmósfera los elementos drone y los sonidos ambientales van construyendo una pista psicodélica de inequívoca vocación espacial. Zumbidos y unos pausados tambores, crean el ambiente meditativo ideal para mirar hacia nuestro interior.

 

Con un sonido más hipnótico e intenso, los drones nos ponen en una travesía sideral en ‘Refugium (Beyond The Gravitational Field Of Time And Space)’. Elementos kraut y la repetición como bandera de otro corte ambiental en el que la psicodelia nos susurra suavemente acariciando nuestros sentidos. Una catarsis sensorial presidida por la repetición a través de magnéticos desarrollos empapados de efectos y reverberaciones. SHEM inserta voces espectrales en los momentos más tormentosos dando un tono un poco inquietante a un corte presidido por el misterio. Una nueva exploración de insoldables atmósferas ambientales situadas a años luz de nuestro planeta.  La canción concluye con reconfortantes pasajes de guitarra que aportan el bienestar a su tormentoso transitar.

clostridiumrecords