“LOST IN TIME’, el tercer álbum de BLACK SNAKE MOAN, el proyecto de blues psicodélico folk del cantante, guitarrista y compositor italiano Marco Contestabile, entre reverberaciones lleva al oyente a un viaje interior, puntuado por ecos ancestrales, intensos y evocadores. Proyectando su viaje hacia la inmensidad del desierto, marcado por el día seco y soleado y la noche oscura y fría. Con vibraciones a caballo entre ALL THEM WITCHES y THE DOORS, sus psicodélicas y cálidas canciones nos sitúan en un espacio desértico en el que los ecos dark- folk tienen su espacio de protagonismo. Sobre la curva vidriosa del reloj de arena que encierra los granos de los sueños, se desliza la serpiente que dicta el ritmo de la percepción del tiempo. La evolución cíclica de las estrellas, entre la luz y la oscuridad, el sol y la luna, crea un contacto fugaz entre la realidad y la imaginación, el flujo de nuevas visiones. La dimensión psicodélica de BLACK SNAKE MOAN, trae de vuelta en la primera parte del álbum una imaginería hipnótica, narradora de visiones nocturnas, dunas del desierto ardiendo en el horizonte, envueltas por el magma sónico resplandeciente, amalgamando blues, folk y rock psicodélico. Los largos paseos folk, incrustados con bordados orientales, son remolinos de ilusiones que nublan la mente, despertando la noche de los sentidos perdidos. La segunda parte, mientras sale el sol, trae luz y serenidad y abre la puerta al desierto indómito de los sueños, donde Todo nace y donde todo muere, reconectando el pasado con el presente. La naturaleza cíclica que dirige el camino de las canciones, la alternancia de la luz de la mañana y el atardecer, el renacimiento y la transformación; todo revela suavemente recuerdos de felicidad y reencuentro, dando gratitud a quienes se han ido antes que nosotros, a la verdad y las respuestas de nuestras vidas. La noche, deja un vínculo, una relación aún no cumplida. Será a la luz del día, cuando las líneas de pensamiento se vuelvan visibles nuevamente, que se sentirá la magia de la unión y la revelación. BLACK SNAKE MOAN funde el eco eterno de su tierra natal, la tierra de los antiguos cañones etruscos tallados en las rocas de toba, laberintos y complejos funerarios impregnados de misterio, el culto a la muerte y las creencias en la vida de otro mundo – a la espiritualidad de los paisajes del suroeste de Estados Unidos, a los desiertos de los nativos americanos, aparentemente estáticos pero flotantes como espejismos. Un viaje en el tiempo y en el espacio, influenciado por el Delta Blues, el Pysch-Rock y el Folk-Western, compuesto por mini mantras, performances rituales que explotan en vivo en su dimensión chamánica.
‘LOST IN TIME’ está disponible vía Area Pirata Records y el sello estadounidense Echodelick Records, con dos ediciones y artworks diferentes.
‘Dirty ground’ palpita por espacios más propios del medio oeste por tonos mas propios de bandas como ALL THEM WITCHES. Blues y ecos retumbantes cabalgas a lomos de ritmo tribal entre cálidas melodías vocales y efluvios psicodélicos revoloteando en el ambiente.
Las vibraciones desérticas se mantienen en ‘Light the incense’. Una canción con un sonido difusos, ritmo cadente y guitarra reverberantes en dosificados pasajes con aroma al oeste americano. Su atractiva melodía vocal y sus sutiles ornamentos son suficiente para rendirse a sus encantos. Un sueño psicodélico que se desvanece en la naturaleza transitoria de las aspiraciones encerradas en una noche. El humo del incienso revela una nueva visión, celebrando la atemporalidad del mundo de los sueños y emanando la esencia de los deseos que se disuelven bajo el signo de la luna creciente.
El órgano vintage nos introduce en ‘Come on down’. Sonando grave sus zumbidos psicodélicos y ese ritmo inquebrantable miran hacia el pasado para encontrarnos con THE DOORS en un viaje de peyote en la noche del desolador desierto. La canción me recuerda a PHAMTOM DIVINE COMEDY, aquella banda misteriosa de la que se decía que su cantante era el mismo Jim Morrison. Aquel espíritu se plasma aquí con gran acierto.
‘Shade of the sun’ y sus tonos acústicos me trasladan a una noche calurosa en un porche de Oklahoma. El lugar en el que podríamos ver tocar su guitarra y cantar sus canciones a J.J. Cale o a Neil Young. Esa mirada atrás de BLACK SNAKE MOAN es algo que gratificará a aquellos viejos fans de los viejos sonidos del medio oeste. Melódica y susurrante su suave tono consigue penetrar en nuestros sentidos con la brisa de sus dulces melodías.
‘Sunrise’ rememora el blues y los sonidos campestres con aroma doorsiano y un tono oscuro a la ves que cálido. Sustentada en una sencilla melodía acústica la pista nos arrulla suavemente con su poder narcótico.
Entre los ecos psicodélicos británicos de los 60’ y los coloristas sonidos de la west-coast ‘Goin back’ con una sencilla melodía consigue erigirse como otra interesante canción con aromas campestres. La sencilla pista se recuesta en los tonos acústicos para, a través de los sueños, explora sus propios lugares de memoria de su tierra natal a la luz del sol de un nuevo día, abriendo la puerta al renacimiento de su propio espíritu.
Llevándonos nuevamente a un espacio en el que los desértico se nutre de suave psicodelia, ‘Put your flowers’ gravitan en una turbia atmósfera con su marcado sonido de órgano y un zumbido persistente que hace que los tonos borrosos predominen.
Con un título como ‘West coast song’ no es difícil adivinar el contenido de sus surcos. Una canción acústica que gravita entre acordes folk, y suaves ecos psicodélicos mas propios de la california de finales de los 60’s.
La balada ‘Cross the border’ pone el broche de oro al álbum con su calidez y oscuridad. Casi en modo loner-folk, los acordes acústicos de la guitarra acompañan bellas melodías vocales con una sutil instrumentación en segundo plano. Una hermosa canción que huele a sur y a flores.

