Unos años después, llegaba la hora de regresar a la localidad alemana de Netphen para vivir nuevamente el FREAK VALLEY FESTIVAL. Uno de los mejores festivales de la escena europea y en el que cualquiera se siente como en casa. Rodeado de rostros familiares, y tras un largo viaje desde España con paradas en Zaragoza donde pude ver a The Riven, White Coven y Zalomon Gras, y tras atravesar Francia, me tomaba dos días de descanso disfrutando de la naturaleza y la belleza del hermoso pueblo luxemburgués Esch-sur-Sûre desde donde visité otras localidades del Ducado y su hermosa geografía de ríos, valles y cañones. Con las pilas cargadas después de la desconexión en ese idílico entorno, desde allí y tras tres horas y media de conducir por bellos entornos a través de Bélgica, llegaba al mítico Freak Valley cinco días después de mi partida de Madrid. A mi llegada la primera persona que me encontré fue a Reiner, el que, tras un emotivo saludo, me acompaño al interior del recinto donde estaban ultimando los últimos preparativos para que comenzara la fiesta. En ese primer vistazo pude comprobar que todo seguía como yo lo recordaba, un espacio acogedor que me traía gratos recuerdos de mi anterior visita. Poco a poco me iba encontrando con amigos del personal del festival con los que siempre es agradable encontrarse. . Una primera toma de contacto tras a que me dirigí a la zona de acampada. Allí, junto a Caspar y Andreas, montamos nuestro campamento mientras la pradera se iba llenando visitantes. Un público fiel y asiduo que se conoce a la perfección tras muchos años compartiendo eventos. Aprovechaba la jornada para tomar unas fotos y videos de la zona de acampada ya que los siguientes días sería ciertamente difícil. Relajado y compartiendo cervezas y risas con la multitud de conocidos que llegaban, concluía mi jornada previa con la ilusión de que la fiesta empezara. El festival cuenta con una grandísima oferta de puestos de comida y stands de merchan y de diferentes actividades, sus sofás, , la gente con sus sillas, los niños con padres y abuelos, y ese ambiente relajado a la vez que festivo, hace que FREAK VALLEY continúe siendo uno de mis festivales favoritos. La profesionalidad con la que la organización prepara su evento para que todo el mundo se sienta cómodo, las magníficas instalaciones y el gran line-up, hace del festival una cita obligada para el comienzo de la temporada veraniega de festivales, pero sobre todo el amigable público que cada año lo vistita son difícilmente superables. El festival nuevamente contó con la presencia de la gente de Rockpalast retrasmitiendo en directo el evento lo que indica la notoriedad que este tiene.
JUEVES
SARKH abrían la jornada bajo un sol de justicia. Con el público llegando poco a poco al festival, la banda iba cogiendo ritmo y el público iba entrando en calor. Su sonido de post-metal, con guiños post rock y alguna reminiscencia más pesada, la banda calentó a una audiencia con ganas de fuertes emociones.
THE POLVOS aterrizaban en FREAK VALLEY cumpliendo el sueño de poder tocar en Europa ante un público maravilloso. Así me lo transmitían momentos antes de subirse al escenario. La coincidencia del idioma hacía que la charla fuera sumamente gratificante, encontrándome a una formación ilusionada en este primer viaje a Europa desde su Chile natal. La banda iniciaba su actuación con su psicodelia espacial con un ritmo lento que poco a poco iba cogiendo fuerza incrementando la intensidad y desviándose hacia territorios en los que sus ritmos kraut conquistaban a un recinto ya con más publico, que caía conquistada rindiéndose a su hipnotismo. la audiencia que no paraba de menear sus cabezas al son del hipnótico ritmo de los chilenos en un show que fue de menos a más. Ojalá podamos disfrutar de su propuesta nuevamente. En los días posteriores, la banda se mostraba exultante por el privilegio que para ellos había sido tocar aquí.
THE THING era otra banda a la que enfrentaba por primera vez. Teniendo en cuenta que el festival estaba comenzando y solo había tocado dos bandas antes, traté de empaparme de su sonido con tintes siderales como calentamiento lo que nos esperaba más adelante. La banda caminaba por ancho espectro estilístico con ciertos tintes vintage.
Aprovechando el momento entre bandas me pude encontrar con multitud de amigos entre abrazos y risas y algunas cervezas.
La siguiente banda era THE DEAD REDS. Unos jóvenes que se subían por vez primera a un escenario alemán para plasmar ese espíritu del verano del amor con momento de rock vintage y ropajes acordes a su propuesta sonora. Se trata de una joven banda que me transmitió buenas sensaciones con su groovy contagioso, con su cantante alternado la guitarra y la siempre amigable flauta. Puede que teniendo en cuenta la multitud de bandas que hay con esas características, por el momento, no destaquen demasiado, pero consiguieron ofrecer una aceptable actuación en medio de la calurosa tarde.
JOOLS resultaron ser una agradable sorpresa. Una banda con dos vocalistas, uno femenino y uno masculino que se complementaban en ese aquelarre de intensidad y rabia acompañados de una irreverencia punk. Constantemente caminando y danzando sobre el escenario la formación transmitía toda su vitalidad haciendo que la audiencia explotara desenfrenadamente. Con canciones de puro heavy rock, la energía desbordante de la banda fue bien recibida por la audiencia. El momento álgido de la actuación fue cuando su aguerrido cantante se lanzaba al público para interpretar una canción haciendo crowdsurfing sobre las cabezas de un personal enardecido en sus momentos.
WINDHAND eran uno de los atractivos de una jornada que tendría su broche de orocon los alemanes más queridos, pero ahora era el turno de la banda estadounidense. Ellos ofrecieron a aquello que sus fans pueden esperan de ellos. Ritmos lentos y pesados de puro doom y voces sacerdotales de su cantante Dorthia emulando las tinieblas con cantos cautivadores. Siendo la segunda ocasión que veía a la banda en concierto he de decir que esta vez me resultaron un poco monótonos, algo lineales, sin chispa. Esto no quiere decir que no mantengan la magia que muestran en sus discos, pero ciertamente cuando uno ve en vivo a una banda como ellos, con el prestigio que atesoran, quizás al menos yo, espero un poco más, algo de chispa, cosa que faltó durante su actuación. No parece que yo fuera el único con este pensamiento ya que según me comentaban algunos amigos, coincidíamos en que podrían ser más especiales.

La jornada se cerraba con la actuación de una de las bandas más queridas en Alemania. MY SLEEPING KARMA hacían acto de presencia en el escenario con Sepp portando una vela en memoria de su tristemente fallecido batería Steffen. El ritual comenzaba con su habitual abrazo antes de comenzar. Con unos magníficas visuales de MAD ALCHEMY a la vieja usanza, la música trascendental de MY SLEEPING KARMA inundaba nuestros corazones. A diferencia de la monotonía de WINDHAND, los alemanes repetían una actuación emotiva en la alternaban sus magnéticos pasajes instrumental con la mágica guitarra de Sepp, la contundencia del bajo de Matte y unos sintetizadores que nos elevaban a un nirvana conmovedor. El primer día había concluido y tocaba empezar la peregrinación a la zona de acampada situada en lo alto de una colina cercana. Una dura travesía en la noche tras el cansancio de una jornada intensa.
VIERNES
Repuesto y recuperado, bajé al recinto del festival unas horas antes de que la primera banda hiciera acto de presencia en el escenario. Así pude intercambiar opiniones con el personal de la organización sobre el desarrolla del primer día y poder cargar mis dispositivos ya que en medio del campo no hay ni electricidad ni posibilidad de conectar mi ordenador a la tediosa conexión a internet alemana.
El viernes comenzaba con la energía trash-metal de los noruegos HÄXER. Definitivamente esto no es para mí. Sus rugosas canciones repletas de punk, y black metal no conectaron conmigo.
WEDGE, una banda que he visto en múltiples ocasiones y con la que tengo un vínculo de amistad se sentía agradecidos por tocar en el marco de FREAK VALLEY. Para ellos es como tocar en casa, y eso quedó patente en su actuación. Con un sonido impecable y con la sensación de que en esta ocasión sonaban más robustos y contundentes, Kiryk y sus compinches. Melódicos por momentos, vibrantes y con un groovy contagiosos atraían a cada vez más público sobre su temprana actuación. El trio cumplió con creces las expectativas que puede uno tener de ellos. En unos días me volvería a encontrar con ellos en el festival croata Bear Stone Festival, pero eso será otra historia.
Ya había visto previamente a ZIGS ZAGS y a priori no son una banda que me enamore. Su actuación cumplía mis expectativas, con una descarga de rock agresivo con elementos punk en sus entrañas. Tras hacerles unas fotos, me dedique a comprobar el ambiente festivo de se vivía en el recinto.
Los australianos fue la primera gran sorpresa del festival. BATTLESNAKE aparecían en el escenario con unas túnicas blancas a semejanza de los atuendos de los súbditos del Impero Romano. Alas, cuernos y una imagen francamente rompedora, pero eso no era todo, Desde el inicio de su show dejaron claro que venían a demostrar quiénes son como banda. Heavy rock sin concesiones, divertido y dicharachero. La banda rompía los esquemas del personal invitándolos a bailar aceptando una propuesta muy del gusto de la audiencia.

PENDEJ0! llegaban al festival con una sección de vientos aumentada lo que hacía que sus sonidos stoner y sus potentes riffs gozaran de un contrapunto mucho mayor con pastuso enfundado en un traje gris como un auténtico dandy. Una puesta en escena que había llegado por casualidad hace poco tiempo en un show según como me comentaba el pastuso un rato antes de comenzar su actuación. La banda descargada su hábil combinación de stoner con elementos trompetas e instrumentos de viento, con una sección aumentada para la ocasión. El pastuso me comentaba en el backstage que ese nuevo look tenía poco tiempo y que había decidido adoptarlo para nuevos conciertos, clase y personalidad de un tipo encantador con el pude charlar en español comentando como habían trascurrido los últimos meses desde nuestro anterior encuentro.
EARLY MOODS comenzaban su show sin hacer prisioneros. Rock por las bravas con la energía de la vieja escuela. La poblada melena afro de su cantante a semejanza de músicos como Billy Preston y una voz cruda, me impactaban a primera vista, siendo el presagio de una actuación despiadada y ardiente de heavy rock y proto-doom ortodoxo y sin concesiones. Quizás mis expectativas estaban demasiado altas con estos chicos, pero finalmente su show quedó en algo ‘correcto’, sin nada especial que abriera mis ojos, pero aún así, cumplieron su objetivo.

Con SACRI MONTI tengo una debilidad especial. Son una de las bandas que mas veces he visto en los últimos años, y mi relación con ellos es sensacional, pero su música cumple todas mis expectativas. El quinteto se mostraba con una madurez aplastante, como una banda que toca de memoria sus canciones, pero sigue haciéndolo con la frescura de sus inicios. Sus melodías psico-progresivas (cada vez más progresivas), conseguían la aprobación unánime de un público que disfrutaba enormemente con su sobresaliente show. ¡Grandes!
En el segundo escenario tocaron DZ DEATHRAYS, otra banda que no había visto previamente y que disfruté de un par de canciones mientras hacia unas fotos. Energía desbordante que podía al personal a 100 entre bailes frenéticos.

MOTORPSYCHO llegaban al festival con el batería de NEEDLEPOINT demostrando que son una banda versátil y que siempre encuentran una correcta solución a su propuesta sonora. Sin duda desde los primeros instantes la banda dejaba claro quiénes son y por qué tienen la reputación que tiene. Entre guitarras afiladas bajo sus estruendosos y batería capaz de provocar alteraciones sísmicas los noruegos y van declarando su repertorio más rockero. Ellos se son capaces de nadar en distintas aguas con la misma solvencia y en esta ocasión habían tirado de su repertorio más contundente. No siempre es fácil para toda la audiencia entender la propuesta sonora de los noruegos pero en esta ocasión ofrecieron su mejor versión dejando patente que ellos juegan en otra liga, que son una banda que está por encima del resto o de la mayoría. Tras una hora y media en la que fueron variando su repertorio dejándonos claro de lo que son capaces. Entre delicadas melodías, con esas voces duales acarreaban acariciaban a un público predispuesto a disfrutar de un show épico. MOTORPSYCHO supo desde el primer instante como conquistar a su público haciendo que este flotara entre sus progresivas canciones con fuertes matices psicodélicos o que bailaran desenfrenados con su roll de nítida inspiración setentera. sus embestidas de fuerza, pero también su carácter experimental fueron argumentos suficientes para que los noruegos se proclamaban como la mejor banda de la noche y probablemente de todo el festival. Con anterioridad había visto a MOTORPSYCHO seis o siete veces en directo y probablemente este sea el concierto que mejor recuerdo me va a dejar. SUBLIMES, MOTORPSYCHO juegan definitivamente en otra liga. El mejor concierto de todo el fin de semana.
HÄXER, la banda que había iniciado la jornada, repetía en el segundo escenario para poder patas arriba del festival con una audiencia desatada en la que se sucedían y la locura se adueñaba de la noche. Si en su primera actuación habían dado muestras de su potencial, ahora conquistaban una audiencia que en su mayor parte se los había perdido al principio del día.
THE OCEAN ponían el cierre a una intensa jornada en la que MOTORPSYCHO nos habían hecho tocar el cielo con un show impresionante. La banda berlinesa iniciaba su show con su faceta más desgarradora y cruda por metal enérgico ejecutado desde la oscuridad lleno de energía toda una deflagración sónica que era bien recibida por una audiencia expectante según avanzaba su actuación, iban variando el sonido hacia territorio más sosegados en los que el post rock inundaba de finas y agradables fragancias el ambiente del festival.
SÁBADO
La última jornada del festival nos recibía con un sol de justica. Tras tras la clase de yoga dirigida por Judith y amenizada con la música de Wolfgang el personal relajaba su cuerpo para el intenso día que nos esperaba. En escenario principal el joven cuarteto femenino austriaco LURCH daban muestras de sus intenciones con una interesante apuesta psicodélica. Como muchas bandas noveles el manejo de sus instrumentos requería toda su atención logrando un sonido apetecible que era recibido de un grado por un personal que poco a poco se iba acercando al recinto bajo el sol de justicia que creía sobre el mismo.
Un problema con la furgoneta hacía que SCOTT HEPPLE AND THE SUN BAND intercambiaron el orden de su actuación con BUSHFIRE. La banda local, una asidua del festival, era recibida con el cariño de sus múltiples fieles y amigos. Sobre el escenario, y con un nuevo álbum en ciernes, Bill y sus compañeros ofrecían toda la crudeza que llevan atesorando como banda desde hace años. Riffs crujientes, energía y el carisma de su cantante hacían el resto para que esa salida al escenario prematura y sin prolegómenos tuviera su éxito.

Los alquimistas del kraut rock alemán, KOMBYNAT ROBOTRON saltaban al escenario prescindiendo de su habitual indumentaria con batas de científicos. La climatología invitaba en esa calurosa hora a despojarse de prendas que acrecienten esa sensación de sofoco. Sin andarse con contemplaciones arremetían con fuerza desde el principio de su actuación con hipnóticos pasajes de puro kaut-rock del más alto nivel, la banda ofrecía su versión más frenética en una espiral de sonidos cósmicos que hacían que la audiencia balanceara sus cabezas al ritmo del trío alemán. Como si de un imán se tratara de a pesar de la severidad de la climatología atraían al público que se resguardaba en las sombras hacia el frente del escenario para iniciarse en el ritual robótico de la banda. Su actuación transcurría alternando esos momentos de psicodelia que te llevan a espacios en los que expandir tus sentidos con los arrebatadores pasajes en los que aumentaban la intensidad de su diabólico sonido. La banda se despedía recibiendo toda la aspiración del público presente.
Por primera vez veía en directo a la banda danesa HIGHWAY CHILD y desde el inicio de su actuación me atraparon con el groovy de sus canciones y esa fuerza de puro hard rock setentero emplatado en humeante psicodelia. Una fantástica revisión de esos sonidos setenteros que tanto me motivaron en mi juventud y que en el show de los daneses regresaron a mí, pero solo tenía que mirar a mi alrededor para ver que no era el único que estaba disfrutando ya que a pesar del implacable short que caía sobre FREAK VALLEY la gente se divertía bailando entre sonrisas y caras de éxtasis. Después del parón de mas de una década, estos chicos siguen rockeando de la mejor forma posible. Uno de los conciertos que más me llenaron de vida y que me pusieron a bailar al ritmo de sus canciones entre foto y foto.
Una de mis bandas favoritas del line-up eran los portugueses TRAVO. Con ellos me encontrado en múltiples ocasiones y a su llegada pude saludarlos efusivamente. Estos chicos han tenido un despegar fulgurante, y en cada una de sus actuaciones suben el nivel. Esa psicodelia espacial con claras similitudes con bandas como los propios SLIFT, de hecho, su guitarrista toca la guitarra elevada junto al pecho al igual que el guitarra francés. Es un argumento suficiente para arrasar con sus frenéticas y electrizantes canciones cósmicas. Una banda que sigue escalando y forjándose su reputación a base de buenas actuaciones.

Hacía ya años que no veía en directo a WUCAN. Tras una larga espera la banda aparecía con un nuevo álbum a punto de ver la luz.Centrándose en el rock pesado de siempre la magia de sus canciones con momentos de flauta y theremín hace que sus actuaciones adquieran un tono distintivo. El marcado carisma de su cantante Francis, hace de WUCAN una banda especial, una banda que ejecuta su rol a la perfección. Si bien su actuación camino por la senda del hard & heavy rock clásico, continuaron mostrando destellos de ese hard progresivo que por momento se acerca al folk, pero básicamente se mantuvieron en un espacio rockero que hizo bailar al público, sin ninguna sorpresa añadida.

La tarde avanzaba y otra de mis debilidades aparecía sobre el escenario. Los noruegos THE DEVIL AND THE ALMIGHTY BLUES rescatan el legado de Robert Johnson envueltos en una atmósfera contemporánea en la que sus blues psicodélicos se nutren con la pesadez de sus riffs de tendencia Stoner. Esa combinación es una apuesta ganadora, y en el recinto del valle se demostró una vez más. La capacidad de su cantante Arnt O para crear ese ambiente cautivador junto a sus compañeros son un elemento diferenciador de una banda que desde sus inicios sigue consolidándose como una apuesta segura en cualquier festival. Solo queda que los noruegos nos deleiten con un nuevo álbum ya que hce demasiado tiempo que no tenemos material nuevo de la banda. Aún así sus canciones fueron interpretadas con la solvencia de unos veteranos. En la noche pude charlar un rato entre bastidores con los chicos de la banda, y estos me comentaban que querían venir a España a tocar, pero que los promotores españoles no estaban por la labor de contratarlos. ¡Anímense promotores españoles!, porque THE DEVIL AND ALMIGHTY BLUES son una grandísima banda.
SCOTT HEPPLE AND THE SUN BAND finalmente actuaban en el segundo escenario haciendo que la gente se uniera a su particular fiesta vintage. Ellos son una banda divertida y desenfadada que nos hace rememorar aquellos guateques de los 60’s con su rock fresco y dicharachero. Durante su actuación los mas bailones tuvieron su trozo del pastel gracias a su entretenido concierto.
Llegaba la hora de uno de los platos fuertes del festival. DEAD MEADOW son una de las bandas pioneras de la escena contemporánea psicodélica. Habían pasado unos ocho años de la única vez que los había visto en directo, y aquel show fue ciertamente accidentado no dejándome un gran recuerdo del mismo. Ahora, tras la lamentable pérdida da de su anterior bajista y de la publicación de su magistral último álbum, me centraba en disfrutar de su actuación. Ya caída la noche y con el festival llegando a su final DEAD MEADOW dieron un show relajado que cortó la euforia del público. Interprtando con maestría sus canciones la banda no interactuaba con un público que se quedaba algo perplejo por la introspección de estos músicos. La actuación era acompñada por las mejores proyecciones sobre el escenario. No sé si no era el momento para mí pero esta actuación me resultó algo lineal y sin chispa, pero esto no está reñido con la calidad que mostraron. Una especie de sensaciones encontradas ya que lo que escuchaba sonaba muy bien, esa guitarra empapada de fuzz y wah wah, esa voz cálida y envolvente, unas luces apropiadas, pero le faltó algo de sentimiento para que su música penetrara en mí como lo había hecho al escuchar su magistral último álbum ‘Voyager To Voyager’ (reseña aquí). DEAD MEADOW se presentaron como una gran banda psicodélica (que sin duda lo son), pero para un público que llevaba bailando toda la jornada, quizás no fue el show perfecto para poner la guinda a un magnífico fin de semana. Otra vez será, no pierdo la esperanza.

La hora del final había llegado y uno de los grandes nombres del cartel aparecía sobre el escenario de FREAK VALLEY para escribir el capítulo final de la edición 2025 del festival. THE SWORD son una banda reputada y con una gran legión de seguidores, pero nunca he profundizado demasiado en su música, por lo que ahora tenía la oportunidad de cambiar mi percepción sobre ellos. Cuando una banda tiene el nombre y la reputación de los tejanos mi predisposición para dejarme sorprender es absoluta. Lo que me encontré fue a una banda veterana, que tiene las cosas claras, pero que definitivamente no me aportó nada especial. Su concierto fue como sus fans podrían esperar de ellos, pero su sonido heavy-rock, a estas alturas de mi vida no me hace despertar, lo siento. En eso no coincido con la mayor parte de la audiencia que disfrutaba con sus poderoso riffs pesados. El cansancio se apoderaba de mi, y decidí que el festival había concluido para mi antes de que concluyeran su actuación, pero de camino a la zona de acampada podía escuchar la algarabía que se desataba al termino de cada una de sus últimas canciones. La edición 2025 había concluido para mi dejándome repleto de buenos momentos musicales, pero especialmente de buenos momentos personales, ya que el hecho de estar rodeado de multitud de conocidos y amigos con los que tengo la misma conexión musical e incluso personal, hizo que mi largo viaje hasta el Valle hubiera cumplido con mis mejores expectativas, ya que FREAK VALLEY FESTIVAL es un festival único y un referente en la escena europea, y un vez mas eso quedó patente en esta fantástica edición. Pero no puedo olvidarme de la exquisita (como siempre) acogida que los chicos de la organización, desde Jens hasta Volker, pasando por el personal del backstage, de los técnicos y de todos los que allí colaboran, tuvieron conmigo, haciendo que mi estancia allí fuera sobresaliente y sumamente gratificante. Sin duda, FREAK VALLEY FESTIVAL es una experiencia que todo el mundo debería experimentar alguna vez en su vida. Desde DenpaFuzz doy las gracias a todo el equipo de la organización por la exquisita hospitalidad que siempre tienen conmigo. ¡Gracias, chicos, sois fantásticos! ¡¡¡Hasta la próxima!!!
Mi periplo festivalero continuaba con muchos kilómetros por delante hasta llegar a Passau para BLACKDOOR MUSIC FESTIVAL y desde allí a Slunj en Croacia para BEAR STONE FESTIVAL, y hasta ahora no había tenido oportunidad de concluir esta crónica, pero espero que al menos sirva para que los que estuvieron, revivan su experiencia y para los que no estuvieron, les sirva para que se animen a visitar este fantástico Festival.
Puedes ver todas las fotos de todas las bandas en nuestras redes sociales:

























