‘HIRSCHBRUNNEN’ es una colección de canciones que muestran una amplia gama de influencias de rock psicodélico, música electrónica antigua, progresivo de los 70, así como jazz e incluso sonidos ambientales que nos muestra una faceta desconocida del líder de ELDER, Nick DiSalvo bajo el nombre de su nuevo proyecto DELVING. Prescindiendo de las voces, y de los riffs Stoner con los que ELDER nacieron, aquí se exploran otras vibraciones hasta ahora desconocidas, o no tanto, si tenemos en cuenta el camino que ELDER ha tomado en los últimos tiempos. Seguramente algunos fans de la banda puedan verse decepcionados por lo que ofrece ‘‘HIRSCHBRUNNEN’, pero sin duda otros podrán expandir su mente para dejarse llevar por estas ocho maravillosas canciones. Con una vocación kraut, y unos esquemas mas propios del ambiente, Di Salvo usa toda la gama cromática de su creatividad musical para deleitarnos por acolchadas canciones llenas de elegancia en las que la psicodelia y los sonidos progresivos exploran los confines del post-rock y la música ambiental. Canciones ricas en texturas en las que las guitarras y los teclados intercambian sus roles para ofrecernos siete maravillosos temas de una gran riqueza compositiva. Con un clasicismo intrínseco, las vibraciones más modernistas de la psicodelia más hipnótica juegan con desarrollos instrumentales de gran monumentalidad. Sustentados en un ritmos poderosos y coloristas, cada canción nos ofrece mil salidas. Todo un conglomerado de estilos y vibraciones dispares que se unen en un coctel sonoro muy apetecible. La calidad y creatividad de DiSalvo están libres de toda duda y este álbum lo corrobora. No se si DELVING es un proyecto con vocación de continuidad, pero lo que si tengo claro que con este álbum ha plasmado las inquietudes de un gran músico en unos difíciles tiempos en los que las actuaciones en vivo han desaparecido de la vida de muchos músicos. ‘HIRSCHBRUNNEN’ es la compensación que la pandemia nos ofrece una vez mas con un proyecto personal de un musico que mira hacia su interior.
El álbum fue grabado, mezclado y masterizado por Richard Behrens y Emanuele Baratto en Big Snuff Studio y está disponible vía Stickman Records.
El propio Di Salvo nos da sus impresiones sobre ese álbum: «Soy un compositor casi obsesivo, trabajo en la música todos los días y acumulo una gran colección de fragmentos de canciones e ideas que a menudo no reciben la atención que me gustaría debido al tiempo que paso con mi banda principal «. DiSalvo explicó recientemente.» Gracias a esta pandemia, he tenido mucho tiempo para aprender algunas de las canciones que escribí durante los últimos años y finalmente hacer un álbum que siempre me he dicho a mí mismo que haría. Desde mis primeros momentos como músico, he estado obsesionado con las grabaciones caseras, rogando a mis padres por una grabadora de casete Tascam de 4 pistas para Navidad cuando tenía 12 años y haciendo mis propios álbumes. ahondar es una continuación de este espíritu creativo: experimentar todo en la mía, olvidándome de las bandas, los fans y las expectativas y haciendo la música que quiera «.
‘HIRSCHBRUNNEN’ ‘fuente del ciervo’ es el nombre coloquial de una gran fuente que preside sobre una gran área verde cerca de donde vivo «. DiSalvo continúa.» Para mí, ha sido extraño ver mi mundo, que normalmente consiste en una buena cantidad de viajes y estímulos externos, reducido a una ciudad, un distrito, una cuadra durante tanto tiempo. Por frustrante que sea, puede que empieces a encontrar inspiración y belleza sorprendente en su entorno cotidiano que de otro modo han ignorado. Así como toda la música que hago está influenciada por mis experiencias, ‘HIRSCHBRUNNEN’ es un producto de esta época única y extraña en la que todos nos hemos visto obligados a ahondar más profundamente en nuestros propios pensamientos.

El álbum abre con ‘Ultramarine’, ocho minutos de experimentación atmosférica sustentada por ritmos kraut y delicados pasajes de guitarra en tonos psicodélicos. Con coqueteos post-rock el tema explora paisajes neo-psicodélicos con elementos electrónicos salidos de unos teclados estratificados que ahondan en su espíritu modernista. Si bien encontramos cambios de ritmo y pasajes progresivos el tema se inclina por un sinfonismo ensoñador. Casi en un espectro más propio de la música ambiental la solidez de sus tambores ofrece un prisma diferente y particular a un corte chamánico. Un clasicismo momentáneo en sus pasajes más sosegados que sirve de pausa ante una embestida mas pesada y envolvente. Todo un arco iris multicolor que no reniega de la esencia pesada de DiSalvo pero que nos ofrece otra perspectiva de su música.
‘Delving’ fluye en una estancia más melancólica con protagonismo de la guitarra hipnótica repitiendo sus acordes. Aquí los paisajes progresivos se muestran esplendorosos en un escenario para la relajación con un trasfondo sólido. Desde su comedida apertura el tema apunta a una explosión que puede suceder en cualquier momento. Un entorno casi minimalista que se enriquece con distintas texturas sonoras flirteando con vibraciones post-rock de gran elegancia. Poco a poco el tema va absorbiendo al oyente haciéndole participe de una narrativa llena de magnetismo. Las sedosas texturas acaban por envolver al tema en un majestuoso atuendo de belleza sin igual en una composición rica en matices.
Sin abandonar ese entorno ambiental presente en todo el álbum, ‘The reflecting pool’ se sustenta en magnéticos ritmos coloristas de los que asoma una línea de bajo excelsa y cálida. Teclados y guitarras se incorporan a una fiesta sensorial en la que cada nota ofrece una visión diferente de la creatividad de Di Salvo. Con todos los instrumentaos ensamblados el tema va ondulando en sus luminosos sonidos con un cierto tono nostálgico. Nuevamente el escenario progresivo de inclinación post-rock aparece con gratificantes pasajes que mutan constantemente.
‘Wait and see’ mantiene la apuesta por paisajes psico-progresivos con inclinación clasicista. Con los teclados como protagonistas, el tema sigue con los ritmos hipnóticos aportando un gran dinamismo a pesar de describir un entorno más propio de la música ambiental. Usando los instrumentos con destreza los acolchados pasajes transmiten una gratificante calma al oyente. Un tema complejo, pero con un resultado atractivo. Monumental por momentos, psicotrópico en otros, pero sobre todo hipnótico y magnético sin renunciar a los pasajes de romanticismo clásico. Pero el tema no solo se queda ahí, sino que en su parte final nos ofrece una explosión de solos de guitarra con unos ritmos mucho más pesados.
El tema que da nombra al álbum, ‘Hirschbrunnen’, se desarrolla en atmosféricos desarrollos susurrantes de vocación ambient en su apertura, para decantarse por un espacio instrumental de suma belleza. Envuelto en efectos y teclados sus sedosas texturas flotan con sutileza entre las distintas exploraciones sónicas de Di Salvo. Tupido y versátil, los teclados crean un entorno magnético con sus pasajes progresivos que nunca sabes donde nos van a llevar. ¿Un jardín del Edén?, ¿un mundo mágico?, seguramente solo en la mente de Nick está la respuesta, pero el balsámico tema penetra en nuestros sentidos transmitiéndonos un abanico de agradables sensaciones. Juegos de música electrónica, desarrollos kraut de corte progresiva y ese tono romántico que aparece en cada canción.
‘Einstürzende Plattenbauten‘ sirve para dar una vuelta de tuerca más. Atrayentes pasajes de guitarra y unos ritmos más intrépidos ponen el musculo a un corte más pesado que no renuncia al virtuosismo para atraparnos en sus surcos. La guitarra incisiva con bellos pasajes de gran magnetismo y los tupidos ritmos dan un giro a los temas precedentes para sorprendernos con un corte diabólico y magistral a la vez. A diferencia de los temas restantes, aquí con tres intensos minutos logra conquistarnos.
Para cerrar, ‘Vat’, con sus once minutos pone la guinda a un magnífico y sorprendente trabajo. Sus atmosféricos pasajes de tonos psicodélicos se salpican de luminosos ritmos kraut entre una instrumentación psico-progresiva. Con pinceladas electrónicas y un magnético bajo el tema va cogiendo forma. Dejándose llevar por pasajes post-rock el tema se engrosa para mostrarse más contundente en largos desarrollos que van intensificando su sonido hasta elevar el tema a un estadio de monumentalidad con tintes cósmicos. Toda una bacanal sónica que acaba por arrollarnos entre guitarras, teclados, efectos, y unos poderosos tambores.