DAEVAR el trío de Colonia, arranca 2025 con su tercer álbum, SUB ROSA, donde evoluciona su sonido Doom Grunge con ráfagas melódicas de ritmo rápido y texturas lo-fi. Basándose en sus lanzamientos anteriores, capturan la energía pura de la década de 2020 con riffs intensos y potentes, letras sin complejos y un espíritu DIY implacable». Mostrando una evolución en su sonido y presentando canciones más melódicas, DAEVAR se consolida como una banda a tener en cuenta en la escena doom europea. En poco mas de media hora, el trio nos sume en un escenario sonoro en el que la suavidad de sus melodías vocales protagonista una ceremonia llena de fuzz psicotrópico entre espesas brumas lisérgicas. Con muchas reminiscencias de los ecos alternativos de los 90’s, sus pistas se adentran en etéreas atmósferas en las que las que sus monolíticos riffs se resquebrajan entre cantos ensoñadores. La belleza puesta al servicio de las tinieblas en un trabajo que fluye con hechizantes estribillos y voces aterciopeladas en un seductor ritual de psycho-doom en línea de bandas como Windhand. Con la creatividad intacta, DAEVAR presentan su tercer álbum en poco más de dos años, ‘DELIRIOUS RITES’ (reseña aquí) en 2023 y ‘AMBER EYES’ (reseña aquí) ,algo que en los tiempos actuales no suele ser lo habitual. Esto corrobora que estos jóvenes alemanes van completamente en serio, como hay lo confirma su presencia en múltiples festivales de la escena europea en los últimos meses. DAEVAR son una apuesta segura para que el legado del doom psicodélico siga volando las cabezas de la gente, su frescura y capacidad para colorear sus canciones con elementos grunge o incluso de metal, hace que sus composiciones resulten frescas, a la vez que auténticas, sin renunciar a la ortodoxia del doom tradicional.
DAEVAR son: Caspar Orfgen (guitarras) Moritz Ermen Bausch (batería), y Pardis Latifi (bajo/voz)
‘SUB ROSA’ está disponible vía The Lasting Dose Records
‘Catcher In The Rye’ gravita en espacios etéreos impulsado por voces ensoñadoras y un ritmo lento pero pesado. El contrapunto perfecto entre la dulzura y la belleza de las cautivadoras melodías vocales, y el sonido plomizo del trio. En ese tono melancólico DAEVAR encuentran su kriptonita.
Los ecos del grunge de Seattle aparecen sin rubor en ‘Siren song’. Su comedida apertura nos lleva a un espacio en el que las reminiscencias del sonido de los 90’s se nutren de una atmósfera turbia y pesada. Ese espíritu alternativo tan presente en los anteriores álbumes de la banda alcanza aquí cotas elevadas de calidad envuelto en oscuras y nebulosas atmósferas.
La rompedora ‘Wishing well’ persiste en las voces etéreas y los ritmos estruendosos habituales de la banda de Colonia. Con un logrado contrapunto entre lo pesado y lo volátil la melodía principal copa el protagonismo de otra pista pesada y melódica a partes iguales. Este sello de identidad de DAEVAR queda fielmente reflejado en otra canción con suficientes argumentos para conquistar al oyente.
Los sonidos graves impulsan ‘Daughter’ a ese entorno lúgubre y cautivador en el que el trio suele hacer desarrollar sus canciones. El dinámico ritmo de sus contundentes tambores contrasta con la dulzura de esa voz seductora que acaba por atrapar al oyente en sus cantos de sirena. La canción cuida su estructura melódica haciendo que lo borroso de su sonido sea una atractiva anécdota en modo Stoner doom metálico.
Impulsada por potentes tambores y riffs crujientes ‘Mirrors’ devuelve a la banda al corazón de Seatlle en el final del siglo pasado. El espíritu alternativo que vio nacer a estos jovenzuelos se manifiesta grandioso en una canción épica, pesada y sumamente melodiosa, algo que pudiera parecer una contradicción, pero que DAEVAR resuelve con solvencia.
Tirando del psycho-doom de manual la intensa y plomiza ‘Forgotten tale’ evoca el legado de bandas como WINDHAND, posiblemente el mejor referente para definir el sonido del trio. Lenta, mágica, difusa y plomiza, la pista cuenta con un buen trabajo de guitarra de Caspar, así como los habituales pasajes melódicos de su máxima sacerdotisa Pardis Latifi , combinando la crudeza de su bajo con la sensualidad de su melódica y cautivadora voz. Todo un ritual ocultista con múltiples detalles escondidos entre sus surcos.
Cerrando el álbum ‘FDSMD’ corrobora el buen manejo de los sonidos lo-fi que van en los genes del trio. Doom ortodoxo envuelto en solos psicotrópicos llevando al oyente a un ritual ocultista con tonos los ingredientes necesarios para derretir tu cara. Toda una nebulosa de sonidos ocultistas. Un cierre épico para un álbum que eleva a la banda en busca de un lugar en el Olimpo del psycho-doom europeo.
DenpaFuzz 