SACRI MONTI regresan con un nuevo álbum en el que muestran su faceta más pesada y progresiva. Evolucionado en su sonido hacia espacios mas propios de los dinosaurios del hard-progresivo de los 70’s, el quinteto de San Diego presenta un álbum con la seña de identidad de la banda. A veces solo necesitas escuchar unos segundos de una canción para identificar a la banda que la toca. Esto sucede con SACRI MONTI, una banda que continúa creciendo musicalmente y que conserva intacta su esencia y autenticidad. Elegantes, embriagadores, melódicos, épicos a la vez que ácidos, estos chicos escarban en el pasado con herramientas sonoras del presente, y lo hacen con solvencia y maestría. Así consiguen que sus canciones se nutran de los genes de bandas como Deep Purple, sin perder su esencia lisérgica. Si algo ha caracterizado a SACRI MONTI desde sus inicios ha sido la facilidad que tiene para componer canciones melódicas rebosantes de fuerza. Ese punto fuerte de la banda se amplifica en esta ocasión con un sonido contundente y pesado que contrarresta sus pasajes más balsámicos, proporcionando una cautivadora escucha. Si a esto unes la facilidad con la que se dejar llevar por los efluvios lisérgicos, obtienes un álbum monumental como ‘RETRIEVAL’. Poco más de media hora que nos deja con ganas de más, porque las atmósferas setenteras en las que hacen gravitar sus canciones son sencillamente grandiosas. Seguramente percibirás vibraciones que resulten familiares en cada una de las pistas, pero también serás sorprendido por un sinfín de gratificantes sensaciones que te sacarán de tu sueño, para transportarte a un mundo mágico lleno de belleza. SACRI MONTI lo ha vuelto a hacer, algo que ya de no debe sorprender a nadie, porque su sonido es único y personal, una ‘marca propia’ que nos vuelve a deslumbrar con un álbum sobervio.
SACRI MONTI son:Brenden Dellar (Guitarra y voz), Dylan Donovan (Guitarra), Anthony Meier (Bajo),Evan Wenskay (órgano y sintetizadores) y Thomas Dibenedetto (batería).
RETRIEVAL‘ está disponible vía Tee Pee Records.

Mirando con descaro al hard-progresivo de los 70’s, ‘Maelstrom’ la primera canción que la banda nos desveló de su nuevo álbum. Una pista con un tupido sonido vintage que evoca tiempos pasados a través de una conjunción de elementos psico-progresivos sustentados por el hard rock más auténtico. Arrolladora por momentos, la canción palpita en sus poco mas de tres minutos con melodías que se balancean una y otra vez. Su tono melancólico es contrarrestado por una fuerza descomunal, lo que la hace una pista excelsa y llena de argumentos para conquistarte.
Los de San Diego ya nos han mostrado anteriormente que son una banda con sensibilidad, y que las ‘baladas’ son uno de sus puntos fuertes. Así la belleza brota de cada nota de ‘Desirable Sequel’. Hermosa, y comedida, la canción mantiene el tono vintage entre bellos pasajes instrumentales que se complementan con una voz cautivadora. Siempre dando en clavo, SACRI MONTI, nos demuestran una vez mas que saben componer bellas canciones que te llegan al alma. Órgano, guitarras ácidas, voces acolchadas y un ritmo trepidante son suficientes argumentos como para no resistirse a una propuesta sonora que sabe como llevarnos a territorios progresivos sin perder su esencia a lo largo de siete minutos intensos y rebosantes de belleza.
Con un sonido aparentemente más pesado, la épica de ‘Intermediate Death’ nos sitúa en un espacio hard-progresivo de manual. Una apertura grandilocuente deja paso a un entorno apacible en el que el sonido del órgano en línea Purple va señalando el camino. Una atmósfera retro, y un sonido analógico nos envuelven entre fascinantes melodías. Con un ritmo que va y viene en su intensidad, la banda no abandona su propósito creando otra maravillosa canción.
Los ocho minutos de ‘Brackish/Honeycomb’ suponen una gratificante excursión a territorios hard-prog de los 70’s. Jugando con los teclados y guitarras la pista se adorna con aterciopeladas voces y un aura psicodélica que inunda de color su melancólica melodía. Oscilante y con una amplia gama de matices la pista ondula en su deambular por ese mundo fantástico que nos proponen los californianos. Una de las canciones mas complejas del álbum, lo que no impide que la pista conecte con el oyente llevando a un gratificante y majestuoso viaje sonoro. En su parte final la pista se vuelve mas loca y experimental con impactantes momentos de rock ácido en una auténtica locura sonora.
Por la vía rápida, las revoluciones se bajan con ‘Moon Canyon’. Una bucólica pieza acústica de dos minutos y medio que sirve de bálsamo al frenesí de la canción anterior.
Manteniendo el tono acústico, ‘More Than I’, parte de una apacible introducción para eclosionar en un torrente de vibraciones vintage. Hard-progresivo de manual asediado por guitarras ácidas y un tono épico. Todo un mundo fantástico se abre ante nosotros entre palpitantes pasajes meditativos en los que la psicodelia custodia el ambiente. Un giro argumental en una canción que todavía tiene mucho por ofrecer. Su sinfonismo contrasta con la potencia de una melodía llena de fuerza. De nuevo las guitarras brillan a un altísimo nivel mientras la pista nos sume en inquietantes bosques cubiertos de una densa neblina psicodélica. Otra maravilla sonora con una apariencia monumental que siempre sabe como traspasar el umbral bajo un ambiente nítidamente vintage.